martes, 12 de enero de 2021

“No siempre puedes conseguir lo que quieres, pero si lo intentas a veces, es posible que encuentres lo que necesitas”

 

A esta altura ya todos sabemos que la pandemia ha puesto nuestra vida patas para arriba.

Literal! Muchas horas tirad@s en el sillón, sentados trabajando o estudiando, sin poder sumar esos pocos pasos que hacíamos para tomar el tren o el colectivo.


Como el COVID-19 aún sigue entre nosotros, les comparto esta información que puede ayudarnos a entender y aceptar por qué es tan importante estar en movimiento.


Resumo algunos puntos que considero relevantes:

  • La pérdida de masa muscular está asociada con la denervación de las fibras, el daño de la unión neuromuscular y la regulación positiva de la degradación de proteínas.

  • Afecta la homeostasis de la glucosa, ya que unos pocos días de reducción escalonada reducen la sensibilidad a la insulina, sobretodo en los músculos.

  • Nuestra capacidad aeróbica se ve afectada en todos los niveles, desde el sistema cardiovascular, incluida la circulación periférica, hasta la función oxidativa del músculo esquelético.

  • La inactividad física, provoca una rápida pérdida de masa muscular, particularmente de los músculos antigravitatorios que utilizamos constantemente para mantenernos erguidos, realizar movimientos y mantener el equilibrio.

  • Si nos mantenemos activos "mantendríamos en sintonía" las motoneuronas y las placas terminales motoras, que garantiza una intercomunicación entre nervios y músculos sin concesiones.

  • El ejercicio físico también, mantiene la liberación de neurotrofinas, que es fundamental para mantener la integridad del sistema neuromuscular.


“No siempre puedes conseguir lo que quieres, pero si lo intentas a veces, es posible que encuentres lo que necesitas”

Entonces ¿qué podemos hacer?

Recomendaciones hay muchas, desde la OMS hasta otras entidades de salud.

Por mi lado, si sos de los que no se mueven ni un poquito y no les gustan las propuestas de actividad física, simplemente hagan este ejercicio:

  • Pone una meta posible de cumplir: caminar una vuelta manzana, por ejemplo.

  • Agendalo como si fuese una reunión de trabajo: al principio será un “obligación” y puede que todavía no lo disfrutes.

  • Interrumpí tu jornada cada 2 horas, (3 horas como máximo) y realizá algún ejercicio simple de fuerza muscular.

Por supuesto, siempre lo mejor es que consultes con un especialista en ejercicio físico.

Los comienzos suelen ser difíciles, por eso es bueno buscar ayuda para dar los primeros pasos!